Nuestro mochuelo quiere aprender más
Nuestro mochuelo quiere aprender más. Y tiene la necesidad de compartir con los demás para decir que nunca es tarde. Queremos que nos des tu mano con fuerzas, con amistad y puede que todos juntos podamos colaborar.
No queremos que tus miedos, tu falta de voluntad, el sentir no puedo, o no creo, o no creo ser capaz. Espero que seas valiente. Que no te importe lo que digan, y menos el qué dirán. Sé verdad contigo mismo, sé verdad con tu verdad. La vida no es nada fácil. La debemos afrontar para saber cuánto cuesta y como debemos luchar, sé valiente, no te rindas, camina como quien eres, sé quién eres, sé verdad.
Amigo/amiga de cualquier sitio, de cualquier lugar, no dudes en venir a vernos y que podamos hablar. Incluso que puedas contarnos hasta podemos soñar. De cosas sencillas, sanas de las que podamos hablar. Estamos faltos de sueños de buena sinceridad. Sé valiente con tus sueños y con tu propia realidad. No tengas miedo a tus miedos o a lo que pudieras pensar. Sé valiente con lo que sueñas y créete ser capaz de convertir tus sueños en realidad. Sé valiente, ven a vernos, disfruta de cuanto sabes, disfruta de la amistad, de cuanto nos da la vida y de cuanto nos pueda dar.
Con vuestro permiso, sigo donde habíamos quedado, en lo negativo del voluntariado, pero contento con mi comportamiento. Pronto olvidé todo lo pasado. Entregándome al campo, el que parecía hacia muchos días que lo había dejado. Creo que fueron tres o cuatro días los que estuve fuera. Y ya que de paso visité a un tío mío el cual vivía en la Barca de la Florida, muy cerca de donde yo me había presentado. Para mí, fueron como unas mini vacaciones. Creo que nadie pudo notar el más mínimo agravio a lo ya ocurrido.
Estamos en el tiempo de la poda. Nosotros tenemos un trozo de olivar, plantado por mi padre, de cinco o seis años que había que podar, algo que siempre me gustó y me sigue gustando. Mi ilusión era el hacerlo yo, pero ¿cómo pides hacer algo que no sabes? Hoy sé que, con ilusión, con ganas y verdad se abren puertas y ventanas, las que no te puedes imaginar. No debo olvidar que tuve un padre muy trabajador, analfabeto pero muy compresivo. Un factor importante para yo poder probar y limpiar los olivos. Debo de estar muy agradecido por dejarme hacer y probar esa primera vez.
A muchos de nosotros, nos parece que no sabemos o que no podemos. Nadie nace sabiendo. Yo digo algo que creo es mío y si no perdón: “no hay ningún fuego que empiece por grande”. A las personas nos suele pasar lo mismo. Anímate, conciénciate, convéncete de que tú puedes si tú quieres. No hagas ni digas lo que yo sueño o digo. Haz lo que tú crees, lo que tú sabes o lo que tú sueñas, pero empieza si puedes. No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Es un dicho muy popular. Tanto que muchos de nosotros no le damos la menor importancia. Espero darte mi mano. Que la podamos apretar y juntos quizás podamos colaborar.
El mochuelo. Juan
Foto de SHVETS production en Pexels
Comentarios