El emprendedor. El empresario

El emprendedor o el empresario:

Creo, quiero entender y pienso que no son la misma cosa, aunque creo que van totalmente unidos. Aunque no sabría definir qué es lo primero. Sin estar totalmente seguro diría que un empresario nace pero tiene que forjarse y sólo sé que para mi la palabra empresario me da respeto al pronunciarla y la boca parece se me hace grande.

¿Por que? Pues no lo sé. Puede que sea porque nunca lo fui. Puede que sea porque lo añoro o porque nunca fui tan bueno como me hubiese gustado ser. Si sé que dentro de mi falta de conocimientos como tal, intenté hacerlo lo mejor. Y hoy comprendo cuantas veces me equivoqué. Eché mucho de menos una formación, un estilo, un patrón, o al menos alguna referencia, para, quizás, haberme podido mirar.

No quiero parecer que hice algo muy mal. Por suerte tengo gente que me aprecian y dicen que no lo hice tan mal. Pero creo que hay una cosa muy importante: no se si buena o mala. Lo que si digo es que no hay mejor crítico que tú si es que eres capaz de mirarte al espejo de la realidad con la que has trabajado. Digo, y no se si vale la comparación: ¿Quien mejor que el artista sabe ver los defectos de su cuadro?

No pretendo dar lecciones a personas muy cualificadas y con grandes experiencias. Pretendo decir algo de lo que he vivido, aunque no se si lo consigo. Decir que fui un pequeño empresario, y no es nada fácil.

Añadiría, además que los empresarios, son además personas hechas de una madera un poco diferente: Su negocio está casi por encima de todo, dando todo cuanto saben y pueden. Sólo esperan a cambio que su negocio funcione.

Ser un empresario pequeño no deja de tener su atractivo, sus satisfacciones, … sin olvidar que debe ser el encargado, el trabajador, el administrador, recepcionista, o contable. Debe saber que tiene guardias casi las 24 horas del día. Pero además, normalmente, más de una vez, es criticado por su comportamiento de preocupación y de trabajo hacia su negocio. No es fácil de entender de cara a los demás.

Yo he dicho alguna vez que el empresario debe tener cualidades. Cualidades algo diferentes. Para mi no sería fácil enumerar cuales serian los buenos o los menos malos. Pues así dejo espacio y temas para los demás. No quiero, ni debo pasarme en mis alabanzas pues todos sabemos que no siempre se dan las circunstancias como para decir que el empresario es poco más o menos un santo. He pensado más de una vez, y hoy que tengo la ocasión lo digo, creo que debería haber algún reconocimiento para aquellas personas que lo dan todo por su negocio. Yo diría que igual como lo debería de haber para el trabajador que lo da todo por la empresa, que también los hay. Creo que es una lástima ignorar a gentes que todos sus esfuerzos lo dedican a su labor y a ayudar a levantar su empresa.

Soy nuevo en estos temas de Blogs y mi formación no es la más adecuada como para dar lecciones, pero sí repito que puede ser que haya muchas personas anónimas que merecerían un reconocimiento popular para fomentar la profesionalidad.

No creo que sea ninguna broma tratar de fomentar la profesionalidad y el amor al trabajo. Cosa en estos momentos bastante deteriorada, igual que las relaciones patrón trabajador. Soy de la opinión de que el patrón y el trabajador deben ir juntos. No revueltos. Pienso que los resultados podrían ser positivos para ambas partes.

Pido vuestra colaboración, vuestras ideas, y vuestros conocimientos y vivencias. Se y creo que con vuestra ayuda podríamos mejorar algo que los políticos o los grandes parece que no les interesa arreglar.

Vuestro compañero El mochuelo de la amistad.

MZV