No queremos parar

Sentimos mucho que en nuestro segundo escrito la primera noticia sea para comunicaros algo no agradable. Por lo pronto, nos vemos obligados a suspender toda clase de actividades, las que algunas ya habíamos empezado. Pero, por el bien nuestro y de los demás, recomiendan esperar un tiempo prudente para, poder disfrutar de esa libertad que todos deseamos. 

Mientras tanto, nuestro mochuelo seguirá creciendo. Pues tenemos que ser como las plantas del desierto que, aun con poca agua, ellas siguen creciendo. No queremos lamentarnos de lo que nos está ocurriendo, si queremos ser cada cual lo suficiente maduro para salir a flote como esas plantas que antes mencionaba.

Con vuestro permiso sigo con lo que ya tenía previsto. ¿El por qué del nombre del Mochuelo? Todo es una pura casualidad. Hace unos años pasando una noche por unos campos de labranza, se topó con el cristal de mi coche, un joven mochuelo, quedando un tanto con dificultades para volar. Lo cogí, lo cuidé, y además tenía para él un buen espacio para volar. Pero después de tenerlo unos años, un día pensé que lo suyo seria que estuviera en libertad. Lo llevé a un centro de recuperación, donde lo prepararían para su libertad. 

Esa misma libertad es la que nosotros anhelamos. El destino quiso que junto al Mochuelo más de un sueño se haya fraguado. Nuestro blog es uno de ellos, el que sin duda quiere demostrar muchas de las cualidades que tiene nuestro mochuelo. No hay duda de que nos queda mucho que aprender, mucho que enseñar, y mucho que colaborar pues estamos convencidos de que el mochuelo, es lucha, humildad, seriedad, formalidad. Son las ganas de hacer un puente muy largo con nuestra amistad. 

El mochuelo sigue con su local, a donde sin duda un día no muy lejano nos podremos juntar para poder hacer toda clase de actividad. Mientras tanto, con los medios que tenemos, aprendamos a echar raíces, pues necesitamos hombres y mujeres, que nos sirvan de pilares para hacer ese puente de la amistad. No queremos dinero. Es tu amistad, es aprender o enseñar, es colaborar con los demás. 

Mochuelo de la amistad.